Ofresco trabajos de secretarios de Estados

Este año fue espectacular para mis mediocres y pálidas aspiraciones. Por eso no espero más realidades que las paranoicas de siempre.
En cuanto al blog estuve ausente por dedicarme a la movida política de esta provincia argentina. El gobernador ha sido elegido y se encuentra gobernando desde hace unos días. He asumido contribuir a la gran confusión con mis propuestas esquizoides, las cuales son muy aceptadas, para complicar el mundo hacia su delirio garantizado.
Busco, por lo tanto, a quienes tengan certificados oficiales de manicomios abiertos para ubicarlos en puestos claves de las deciciones en el aparato del Estado. La paga, esto es así, es mínima como para cubrir un plato de arroz y media botella de agua mineral (el presupuesto es sólo para los que necesitan el lujo para ganarse las minitas, no para los que trabajan.).
Ya saben sensatos y prudentes: ¡¡ABSTENERSE!!

es una poesía aunque no lo crean.

Poesía de violencia.

Una larva viscosa se desprende perezosa de los plátanos.
Lenta, con apenas temblores imperceptibles, rueda entre droseras, a las robustas raíces que describen una geometría de fracturas ampulosas en la centenaria plaza.
El hombre de caminos montañosos suspende su tiempo pagano de abismos para descansar entre frescos aromas de hierbas urbanas. Mientras, en un salto frenético, el grasoso organismo se adhiere a su piel como gabela de una obscena actuación en simulacro de vida.
Ahora sube como excrescencia inodora hacia el centro vital de aquel ser cansado. Aprovecha, en oportunas jugadas, los recovecos frágiles, débiles, del cuerpo humano haciendo nichos para consumir su fuerza milenaria. La deformada larva tiene su orgasmo secreto en repeticiones impotentes.
El cerebro y las sensibles células nucleares inquietan al hombre sobre su violación encubierta. Y entonces, se baña.

Resurreción hipervital

He vuelto. Los virtualismos digitales se cayeron y me han borrado el cerebro de la computadora. La gira de los hipernautas ha pasado varias veces sin que yo pueda tocar sus puertas imaginarias. Volví y soy millones, diría Espartaco con su ejercito revolucionario del romarum populus. Como toda resurrecion se han cambiado las facetas antiguas por otras mejores. Renovado y con mejoras tendré nuevas intervenciones para el mundo garay.

felinos audaces.

Tenemos una cantidad apreciable de gatos domésticos. Han copado la cuadra. Son okupas milenarios. Duermen o hacen que duermen en los mejores lugares confortables y seguros. En la quietud del barrio ejercitan su mirada luminosa en ejercicios inteligentes de anticipar los movimientos nuestros. A veces protectores. A veces desafiantes. Siempre en lo más alto de las alertas. Los gatos descubren nuestro asombro cuando cazan el mejor y más sabroso alimento ofreciéndolos a su hijos a pesar de padecer el hambre.

Esos votos baigorriences

El voto que gana.
Muchos sujetos votan a quien considera, con cierta certeza, va a ganar. Se enrolan generalmente en los llamados indecisos o en los “nosabenocontesta” por lo que la política no tiene incumbencia en ellos. El mecanismo objetivo que mueven a estos sujetos a optar por algo que va a ganar es el de la reproducción simbólica de la producción capitalista. Revelan una conducta cultural cuando utilizan ese objeto-signo como una apropiación y como capital. Ese objeto-signo no puede dar lugar más que a una economía mágica. El voto se transforma en la acción de votar al triunfo del nominado. Se trata de un plus en el cual se capitaliza y que remite a la sobredeterminación de una imposición social más profunda, de prestación simbólica y de legitimación social.
El proceso en el nivel simbólico se refuerza desde varias prácticas sociales siendo el del espectáculo deportivo uno de ellos y el más acentuado por su exacerbación: Como dijo Ana Mª Rico, cuando el equipo favorito pierde decimos que es por el técnico, el jugador, el tiempo, etc., pero cuando gana decimos: ganamos. Se prepara de este modo un modelo de conducta cultural para otras prácticas sociales que funcionan como ecos amplificadores formando una realidad de cultura denominada masiva.
Lo que nos debe quedar margen para pensar es que, si en verdad no es el voto el que debe cumplir con esa exigencia de la cultura de la gente y bien el “ganador” tiene antes que constituirse como tal para que el voto vaya hacia él. En todo caso lo desafiante es modificar la cultura de reproducción capitalista para que los sujetos encuentren en el voto, como objeto-signo, un modo de expresar sus propias aspiraciones como sujetos de iguales.
Eduardo Ernesto Garay. Viernes, 09 de marzo de 2007.
Bibliografía básica; Jean Baudrillard, La moral de los objetos. Función signo y lógica de clase. Comunicaciones. Los objetos. Editorial tiempo contemporáneo; Buenos Aires, 1971.

Complot y Boicot desde la araña eléctrica

¿Qué pasa con mis líneas de teléfonos y la de internet? No funcionan desde hace un mes. Esporádicamente hay tono en el fono. Cuando tengo tono para tener la banda de internet debo descolgar el tubo y conseguir una exitosa conexión. Esto debe ser porque han descubierto que aprendí a usar el programa de eMule! Siempre los de la CIA y sus dependenCIAs argentinas me acechan para darme un palazo. No permitamos este atropello. Lucha y Movilización. ¡Por la restauración de las leyes ya!! Aumento de pulsos con tonos en Re menor.

JOVEN ARGENTINO.

Si quieres ingresar al acelerado mundo de la cocaína tenés las puertas abiertas a la policía provincial de Santa Fe. Pero si tu vocación pide realidades deslumbrantes del LSD ingresa a la honorable policía federal. Asegura tu futuro en esta gran lucrtivo negocio. Colma tu ansiedad de aventuras peligrosas culpando hábilmente a los habitantes de las villas ¡por el tráfico que tu harás!
Colabora con la ficción de justicia. ¡¡INGRESA A LA POLICÍA YA!! (merca de la mejor asegurada)

El templo Pichincha.

Cuando la ley en Rosario expulsó los prostibúlos de la ciudad tuvieron que buscar un nuevo lugar. Granadero Baigorria, en ese entonces Paganini, fue la mas adecuada para que la poblacion mayoritariamente masculina siguiera concurriendo. Hay que decir que los inmigrantes de principios del siglo veinte eran hombres que trabajaban duro y luego pagaban el viaje de sus mujeres a venir a la Argentina. Entre tanto, la salida con las chicas pagas era un sano alivio. Para que la sociedad de Paganini de la década del treinta no protestase, la organización que explotaba a las chicas financió la construcción del edificio del templo católico. Así cuando comenzó a trabajar no hubo problemas y ni los poderes elevaron siquiera una insinuación sobre la actividad.